El Dios de la Vida, Señor de la Historia ha vencido a la muerte, y con profundo gozo y alegría esta mañana toda la comunidad compartió un desayuno para celebrar la Libertad que Cristo nos ha dado tras su resurrección.
Cada curso compartió durante la segunda hora de clases, y los funcionarios disfrutaron de un rico chocolate casero, preparado con canela, clavo de olor y naranja, acompañado de un pan de leche durante el primer recreo.
Durante toda la Semana Mayor, o Semana Santa, con gran recogimiento y emotividad hemos recordado la vida, pasión y muerte de Nuestro Señor, y hoy celebramos la VIDA, en todas sus formas y expresiones. Cristo está presente y su presencia camina a nuestro lado, abramos nuestro corazón y dejémoslo entrar para que veamos su rostro de amor e infinita misericordia.