El día 17 de abril, un grupo de alumnos guiados por el profesor Juan Carlos Almarza, visitaron la oficina de inmigración entre las 10 y las 12 hrs. 

La salida solidaria se realizó con 12 alumnos de enseñanza media y tenía como objetivo compartir la alegria de la Resurreccion con las personas en situacion de inmigrancia.

Rescatamos algunos testimonios, como el de Francisco Aravena , estudiante de 4ª Medio:

"El hecho de ir y poder comprobar en forma directa las distintas realidades humanas en que viven algunos de los inmigrantes en Chile ha sido muy edificante. Es imposible aprender en una sala de clases estas cosas, ya que no se trata de un concepto, o un contexto, sino de personas concretas. Personalmente, me ha calado hondo la idea de que muchos al igual que ellos, deben sacrificar cada día su desayuno, quizá descuidar su salud, y en los casos más lamentables, perder parte de su dignidad humana, por salir adelante en nuestro país. Por esto, aunque a los ojos pesimistas parezca inútil, a nosotros, quienes fuimos a compartir con ellos un poco de pan y de compañía, nos ha parecido que ha faltado más tiempo para compartir con ellos. Tanto así, que al conversar grupalmente sobre lo que habíamos hecho, han surgido de nosotros ideas creativas, concretas y generosas sobre cómo ampliar nuestra ayuda. Las palabras convencen, pero los ejemplos arrastran. Por eso es importante que se divulgue que la Pastoral no está dormida. Los alumnos no estamos dormidos, y vamos a seguir dando ejemplos que arrastren a la sociedad a la inclusión y solidaridad."

Por su parte, Arantzazú Contreras, de 3ºmedio A, señala:

"Mi experiencia con los inmigrantes fue en general muy grata, al principio me costó demasiado desenvolverme porque daba verguenza y además sentía que me miraban feo. Sin embargo después de un rato pude dar con unos jóvenes de Ecuador con los que entablé una pequeña conversación y me di cuenta de que resulta un gran sacrificio llegar a otro país. De lo que rescaté de la conversación, es que era como la cuarta vez que iban a sacar documentos, ya que las veces anteriores no habían tenido suerte. Creo que lo mejor que pudimos hacer o intentarlo fue ir y darles un pequeño desayuno. Lo que espero es que podamos volver y darles algo mucho mejor".